El limitado abastecimiento de agua en el sur de Lima constituye un riesgo para el proceso de mudanza de la industria hacia los parques industriales de esa zona. Por eso, aunque la mudanza ya inició, se está dando principalmente entre empresas vinculadas al rubro logístico.

“Por ahora la mayoría de empresas que ocupa terrenos [en el sur] está relacionada al rubro logístico, que de agua demandan poco frente a lo que necesita una fábrica. Las manufactureras deberían haber migrado primero, porque son las que tienen mayor presión por salir”, explicó George Limache, jefe de investigación de Binswanger. Un ejemplo es Ransa, que ya opera un centro logístico vehicular en Macrópolis. En cambio, empresas como Alicorp, Pepsico y Laive, que han comprado terrenos en el sur para sus fábricas, todavía no se pueden trasladar por falta de agua. A junio del 2018 sólo siete empresas usaban una parte de sus terrenos en parques industriales para fábricas compartidas con almacenes, según Binswanger. 

Por el momento los parques industriales solucionan el abastecimiento de agua con camiones y pozos originalmente pensados para uso agrícola, pues está prohibida la creación de nuevos.

Dos proyectos buscan remediar esta escasez: el ramal sur de Sedapal y la planta de desalinización de Provisur. El primero aún no ha sido adjudicado, según datos de ProInversión, y el segundo está en construcción, pero con retraso. El exministro de Vivienda, Carlos Bruce, dijo que operaría en el 2019. (PB)

Fuente: Semana Económica

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