Real 2, el nuevo edificio de Centenario, ubicado en pleno Centro Empresarial Real y diseñado por el estudio de Jean Nouvel, ha sido la más reciente adición al portafolio capitalino de oficinas corporativas de alto nivel. Aunque sus 12.950 m2 distan de los 30.120 m2 entregados en similar periodo del año anterior, cuando tres edificios se sumaron a la oferta, la expectativa es que el 2018 termine con más metros incorporados que el 2017 a la ofertadel mercado prime.
Según un reciente reporte de Binswanger Perú, este año el segmento corporativo sumará 151.924 m2 a su inventario. Así, a Real 2 se sumarán T Tower, Forum y Numen en el segundo trimestre; San Isidro 27, Talbot, Titanium, More I y Plus Olguín en el tercer trimestre; y Primera Visión hacia el cierre del año.
De esa manera, el 2018 terminará con un 9% más de m2 entregados en comparación con el 2017 (138.165 m2), lo que a decir de George Limache, jefe de investigación de la consultora, jugará en favor del mercado corporativo, porque se prevé que en lo que resta del 2018 la demanda será superior a la del año pasado. “Solo en el primer trimestre se absorbió casi la mitad del total del año pasado y ahora existen varias solicitudes de alquiler de áreas extensas, de más de 1.000 m2, que deben concretarse durante el año.
Es cierto que, desde mediados del 2017, algunas búsquedas de nuevas oficinas se paralizaron por el ruido político, pero hoy, con una señal clara de continuidad del modelo, se reactivaron”, asegura.
¿Solo alquiler?
De la mano con el buen comportamiento de la demanda, el reporte de Binswanger Perú hace incapié en que el mercado corporativo va camino a la etapa de madurez. Según indica, el hecho de que no existan nuevos proyectos que ofrezcan oficinas "prime" en venta dirigida a inversionistas, es una clara señal de esta nueva etapa.
“Todo lo nuevo que está saliendo es de propietario único y ofertado en alquiler. Eso se debe a que el apetito de los inversionistas por oficinas ‘prime’ de formato grande se ha reducido por la amplia vacancia de oficinas similares en Lima, y por la menor velocidad en la que se alquila ahora una oficina, producto –precisamente– de la elevada vacancia”, sostiene Limache.
Para reforzar lo dicho, agrega que las inmobiliarias que ofertaban oficinas ‘prime’ en venta han migrado al segmento B y están lanzando nuevos proyectos de oficinas pequeñas o ‘boutique’ (de menos de 200 metros cuadrados) en zonas alternativas al centro financiero como Lince, Magdalena o La Mar en Miraflores.
“Otro punto a favor de los edificios exclusivos en alquiler es que afrontan mejor los contextos de vacancia elevada. Cuando un edificio se vende a muchos propietarios, ellos terminan compitiendo para alquilar primero su oficina y, como consecuencia, se maltratan las tarifas”, refiere.
Mirada futura
Si en el 2018, el mercado va camino a la madurez, ¿qué pasará en el 2019? Por lo pronto, Binswanger prevé que solo uno o dos edificios se entregarían el próximo año, con lo que la oferta disminuiría significativamente debido, sobre todo, a que los desarrolladores están apostando por construir nuevos proyectos más allá del 2020, mirando más a largo plazo.
Uno de esos desarrolladores es V&V Grupo Inmobiliario, cuyo director Oscar Bravo ha adelantado a Día1 que después de ingresar al mercado de oficinas con Prisma Tower, en una zona en expansión como Magdalena, no tienen nuevos proyectos en el horizonte inmediato.
De esta manera, durante el 2018, el mercado ‘prime’ de oficinas corporativas en Lima entra a una nueva etapa, después de que algunos proyectos previstos a entregarse durante el 2017 se retrasaran y recién empezaran a materializarse desde inicios de este año.
Fuente: Día1